Blogia
Manuel Hernández Villeta

Las posiciones, los estilos y los comportamientos son diferentes...Primera dama, de color, prisionero de guerra, falta ahora saber que personalidad y programa aceptan los norteamericanos

 El virtual candidato presidencial republicano,  John McCain, habla con periodistas luego que su avión aterrizó en  Phoenix, Arizona, el viernes, 2 de mayo de 2008. (Foto de AP/Mary Altaffer).
 En esta imagen proporcionada por el porgrama
 La candidata presidencial demócrata Hillary Rodham Clinton se ríe al ver la camiseta de una partidaria durante un acto de campaña en Terre Haute, Indiana, el jueves, 1 de mayo del 2008.

Las diferencias son asombrosas. Y eso no sólo porque uno es viejo, blanco y republicano, y el otro es joven, negro y demócrata.

 

John McCain, el virtual candidato republicano, es más espontáneo y accesible. En cuanto al precandidato demócrata Barack Obama, es más disciplinado y reservado. Ambos son precandidatos escasamente convencionales. Y cada uno de ellos posee un estilo propio.

 

Inclusive la postura es diferente. McCain, de 1,70 metros de estatura, y de 71 años de edad, parece una baqueta de fusil. Todavía se nota su adiestramiento militar en la Armada de Estados Unidos. Sus movimientos son rápidos y suele marchar con los puños cerrados. A pesar de su informalidad, parece una persona algo rígida.

 

En cuanto a Obama, de 46 años de edad, es más alto que McCain, 1,85 metros. Es delgado, y no parece caminar, sino deslizarse. Sus modales parecen de alguien despreocupado. Excepto que sus presentaciones están pensadas y organizadas muy cuidadosamente.

 

Esos estilos personales divergentes podrían confrontarse en caso de que Obama obtenga la nominación presidencial demócrata, superando a Hillary Rodham Clinton. En estos momentos, Obama aventaja a Clinton en delegados comprometidos, en votación popular y en número de estados ganados. Parece casi imposible que ella lo pueda superar durante las primarias restantes.

 

Para cada candidato, la forma en que actuó en la campaña podría proveer datos sobre cómo actuaría en la Casa Blanca.

 

A Bill Clinton le encantaba conversar con los votantes, al punto que muchas veces llegaba tarde a actos de campaña. Eso no cambió cuando llegó a la presidencia. En cuanto a George W. Bush, era conocido por sus tomaduras de pelo a los periodistas. Bush sigue haciendo lo mismo con la prensa, ahora que está en la presidencia.

 

Ahora, en el 2008.

 

JOHN MCCAIN:

 

El senador republicano por Arizona fue el precandidato más abierto durante la lucha por la nominación presidencial.

 

Pero ahora eso está cambiando, tras convertirse en virtual candidato presidencial. Sus discursos están escritos de antemano y usa con más frecuencia podios y dispositivos para leer discursos en una pantalla, llamados TelePrompTers.

 

Aún así, McCain tiene arranques insólitos. Un ejemplo: en una ocasión, cantó "bomb Iran" (bombardeen Irán) siguiendo la melodía de "Barbara Ann", popularizada por los Beach Boys.

 

Pero ahora McCain ha comenzado a pasar más tiempo en un avión, y su acceso es mucho más limitado. "Es más divertido en autobús", dijo recientemente.

 

BARACK OBAMA:

 

El senador demócrata por Illinois, que intenta convertirse en el primer presidente negro de Estados Unidos, ha creado una enorme red de seguidores, algo que no se veía desde hace décadas en el país. Sus presentaciones están cuidadosamente planificadas.

 

Gigantescos actos de campaña, sin importar si llueve o hay sol, han marcado su precandidatura. Millares de personas se congregan para escucharlo.

 

Ese fue el caso previo a las primarias de Pensilvania, cuando ganó Clinton.

 

En Filadelfia, 35.000 personas se congregaron en un estadio para escuchar a Obama.

 

Cuando aparece Obama en el estadio, precedido por música de rock, la audiencia se deshace de emoción. Obama es un orador muy talentoso. De un carisma natural, se siente cómodo siendo el centro de atención y hablando con los votantes potenciales.

 

Pero en los últimos días, al advertir que la contienda con Clinton en las primarias de Carolina del Norte y en Indiana puede ser muy difícil, Obama ha optado por un enfoque diferente. Ha dedicado menos tiempo a los votantes y más tiempo a dialogar con periodistas.

 

0 comentarios