Los celtis de Bostón ya huelen a campeones...La frustración de los laguneros de Los Angeles

 

Los Celtics de Boston dieron un paso importante hacia la conquista de la NBA, cuando anoche derrotaron 97-91 a los Lakers de Los Angeles en su propia casa y delante de decenas de celebridades de Hollywood.

Ahora la serie se encuentra 3-1 a favor de los Celtics, que irán, con instinto criminal, en busca de la última victoria en la Final.

El triunfo de los Celtics tuvo doble motivación puesto que los dirigidos por Doc Rivers se sobrepusieron al peor de un período inicial en una serie de tanta envergadura en la NBA.

Al final del primer cuarto, los Lakers llevaban ventaja 35-14 sobre los Celtics, la mayor diferencia -21 puntos- en la historia de una Final luego de 12 minutos de acción en el choque.

El récord previo era de 36-16 que los mismos Lakers en el sexto juego de la Final de 1970 contra los Knicks de Nueva York. Los Angeles ganaron ese choque 135-113.

La ventaja llegó a ser de 24 unidades, la más abultada para una Final, pero el esfuerzo combinado de los Celtics comenzó a presionar la defensa de los locales, que se vio llena de brechas y al comienzo del último parcial Boston logró la igualada 73-73, dejando preparado el escenario para un cierre espectacular.

A partir de ese momento, la ventaja cambiaría de bando varias veces hasta que un impulso final de los locales en los cinco minutos finales determinó el rumbo del choque a favor de Boston.

En sentido general fue un choque donde la defensa primó por encima del ataque, y el contacto físico estuvo a la orden del día.

Boston tuvo como líderes ofensivos a Paul Pierce con 20 cartones y Ray Allen con 19, pero Kevin Garnett estuvo muy activo en los finales y terminó con 16.

Lamar Odom, que terminó con 19 unidades, encestó sus siete primeros disparos del encuentro y fue vital para que los Lakers se fuera con cómoda ventaja 58-40 sobre Boston.

Por su parte, Bryant y Gasol colaboraron con 17 puntos cada uno.