Blogia
Manuel Hernández Villeta

Presionan los jerarcas demócratas por la alianza Hillary Clinton Barack Obama

Sí, Hillary Clinton dice que Barack Obama es muy ingenuo e inexperto para ser presidente. Y a Obama le ofende que ella, la del ''segundo lugar'', esté hablando de posibilidades de escoger quién la acompañará en la boleta electoral. 

Pero la historia muestra que los adversarios políticos a veces se unen y comparten la boleta, y ganan. Y si uno lee entre líneas, hay muchos políticos y expertos, incluyendo algunos asesores de Hillary Clinton y de Obama, que no excluyen la posibilidad este año.   Por ejemplo, Howard Wolfson, un portavoz de Hillary, moderó su desdén hacia Obama con este detalle: ''La senadora Clinton no escogerá a ningún candidato que, al escogerse, no pueda pasar por la prueba de convertirse en comandante en jefe. Pero falta bastante tiempo entre ahora y Denver''. La convención del Partido Demócrata será en agosto, en Denver. 

Obama dice que no aspira a la vicepresidencia, y que las sugerencias de Clinton de que ambos pudieran compartir la boleta presidencial es poco prudente, ya que él está en primer lugar. Pero a veces ha ocurrido, y ha funcionado. 

El más notorio de los casos fue el de 1960, cuando enemigos acérrimos como John F. Kennedy y Lyndon B. Johnson se unieron como presidente y vice, y ganaron. 

Johnson era un legendario dirigente minoritario del Senado; Kennedy un principiante de 43 años. Bobby, el hermano de John Kennedy, que era el administrador de la campaña, detestaba a Johnson. Y Johnson no sentía gran afecto por ninguno de los dos hermanos, pues el joven senador venció al astuto tejano en las primarias de ese año. 

Pero, según recuerda Barbara B. Kennelly, ex congresista de Connecticut cuyo padre presidía entonces el Partido Demócrata, dicho partido necesitaba ganar en Texas. Y Lady Bird, la esposa de Johnson, temía que la labor de su esposo en el Senado le iba a afectar el corazón. La pareja unió fuerzas y dio resultado: ganaron en Texas, y esos 24 votos electorales prevalecieron en unas elecciones casi empatadas. 

La unión más exitosa de rivales ideológicos ocurrió 20 años después. Ronald Reagan aspiró como conservador impenitente. George H.W. Bush era el ídolo de los moderados republicanos. Compitieron en invierno y primavera, y al final, aunque Bush había bautizado el plan de rebajas de impuestos de Reagan como ''economía de vudú'' y expresado simpatía por el derecho al aborto, aceptó la invitación de Reagan a formar un dúo presidencial en la boleta. 

''Fue un matrimonio a escopeta'', dice David Carney, que fungió como director político de la Casa Blanca para George H. W. Bush y como director político para la selección de un candidato a la vicepresidencia en la campaña presidencial de Bob Dole en 1996. 

``Ganó la política: ellos querían salir electos, y entendieron que tenían que unir el partido y que el presidente en funciones [Jimmy Carter] era vulnerable. El conocimiento de asuntos exteriores de Bush complementaba la agenda interna de Reagan. Y Bush venía de cuatro estados''. 

Bush nació en Massachusetts, vivió en Texas, se crió en Connecticut y tenía una casa en Maine.

0 comentarios