El PSOE y José Luis Rodríguez Zapatero se preparan a continuar adelante, luego de la reelección

El presidente del Gobierno en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, ganador de las elecciones generales,  realizó una  reunión de la comisión ejecutiva del PSOE, una valoración "muy positiva" de los resultados arrojados por las urnas.

 Zapatero, cuyo partido necesitará apoyos parlamentarios de otras fuerzas, ha admitido que "hay que gobernar mejor" y ha señalado que "en cualquiera de los escenarios: una alianza más estable o acuerdos más puntuales" con otras formaciones, mantendrá una actitud de diálogo "con todos los grupos". 

Además, el presidente se ha fijado las prioridades para la nueva legislatura: "Impulso a la economía, empleo, políticas sociales y recuperar acuerdos institucionales en torno a órganos como el Consejo General del Poder Judicial y el Tribunal Constitucional, fundamentales para el equilibrio institucional". 

Zapatero no ha querido especular sobre el futuro del líder de la oposición, el presidente del PP, Mariano Rajoy, cuya formación ha subido en número de sufragios y escaños pero ha perdido por segunda vez unas elecciones generales ante los socialistas. "No voy a hacer valoraciones sobre el futuro del PP. Mi intención es hablar con el líder del PP para abordar los problemas institucionales que necesitan ser resueltos", ha dicho el presidente. 

Resultado "histórico" en Euskadi 

El presidente ha tenido palabras de especial reconocimiento para los socialistas vascos. Ha destacado el "altísimo valor político" de los resultados obtenidos allí, donde ha superado en votos al PNV, partido en el poder. Zapatero ha hecho mención destacada a Sandra Carrasco, la hija del ex concejal socialista de Mondragón, Isaías Carrasco, asesinado por ETA el viernes pasado. "Especialmente me acuerdo de Sandra, que ha demostrado una madurez y una dignidad ejemplar". 

¿Pactos? 

Zapatero ha considerado "prematuro" hablar de pactos o apoyos puntuales de otras fuerzas en la Cámara para garantizar una acción de gobierno más cómoda. Ha reconocido que las elecciones han supuesto "una modificación de la representación parlamentaria" de las fuerzas en las que se apoyó su Gobierno en la pasada legislatura. 

El presidente ha puesto de relieve la actitud de diálogo que, a su juicio, ha mantenido en la pasada legislatura y ha manifestado que formación como el PNV también la han mantenido. En ese sentido, ha señalado que el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, le llamó y le trató la derrota..