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Manuel Hernández Villeta

Venezuela, Cuba y Nicaragua respaldaron a Bolivia ante supuestos

Imagen de archivo de una reunión del ALBA en Caracas (enero 2008)Indígenas de la provincia de Omasuyos marchan en Warisata, el 18 de abril

Los gobiernos de Venezuela, Cuba y Nicaragua respaldaron a Bolivia ante supuestos "planes desestabilizadores" en contra de ese país.  La declaración de apoyo se produjo al finalizar una sorpresiva cumbre de "emergencia" de los países miembros de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), celebrada en Venezuela.

 En el acuerdo se ratifica el "apoyo incondicional al presidente Evo Morales y a su gobierno en los esfuerzos que realizan para derrotar los planes desestabilizadores y para seguir encausando el proceso de transformación histórica de Bolivia, en paz y democracia".

 

La desestabilización, según los gobiernos miembros del ALBA, está vinculada al referendo autonómico que se celebrará el próximo mes en algunos departamentos bolivianos.

 

En entrevista con BBC Mundo, el presidente boliviano acusó a los líderes de la oposición de buscar la autonomía regional para dividir al país.

 

"El supuesto referendo sobre estatuto autonómico es anticonstitucional, ni siquiera inconstitucional, porque las autonomías no están en la constitución vigente" dijo Morales a BBC Mundo.

 

Bolivia está sumergida en una delicada crisis política desde noviembre de 2007.

 

Los dirigentes de cuatro de los nueve departamentos bolivianos exigen mayor autonomía política y más control sobre las reservas de gas que existen en el país.

 

El primer referendo autonómico se realizará el 4 de mayo en la provincia de Santa Cruz.

 

En la declaración del ALBA no se especificó ninguna acción concreta ante las acciones de las regiones que exigen mayor autonomía.

 

Según el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, Estados Unidos está detrás de la crisis boliviana para poder controlar las reservas gasíferas bolivianas.

 

En la cumbre también se firmó un acuerdo para combatir la crisis alimentaria en el que se estableció un fondo que tiene US$100 millones como capital inicial.

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