Adios a la casa que fue gloria y dolores de babe Ruth..El Yanqui Stadium entra en la cuenta regresiva
NUEVA YORK (EEUU).- El estadio más legendario del béisbol profesional de las Grandes Ligas, el "Yankee Stadium", volvió a vivir una jornada histórica y esta vez tuvo como protagonistas a las estrellas del deporte nacional que se despidieron del recinto con la celebración de la 79 edición del "Clásico de Verano".
Al margen del triunfo por 4-3 de la Liga Americana frente a la Nacional, el partido, que se tuvo que decidir en la decimoquinta entrada después de cuatro horas y 50 minutos, generó el mayor número de emociones que se recuerdan en un "Clásico de Verano".
El motivo, que fue el último que se disputó en el "Yankee Stadium" después de una existencia de 85 años y de ser el escenario donde jugaron los legendarios Babe Ruth, Lou Gehrig, Joe DiMaggio y Mickey Mantle, entre otras de las grandes leyendas del béisbol.
Cuando concluya la presente temporada, el "Yankee Stadium", la sede del equipo con más títulos de campeón del mundo dentro del deporte profesional, los Yankees de Nueva York, será demolido para que la próxima temporada comiencen a jugar en un nuevo recinto que ya se está construyendo.
La cita histórica con el "Clásico de Verano" en el Yankee Stadium atrajo una asistencia récord de 55.632 aficionados que también pasaron a formar parte de la jornada de despedida y homenaje. Espectadores a los que no les importó que fuese el Partido de las Estrellas con las entradas más costosas, con precios de entre 525 y 725 dólares en los asientos del anfiteatro de abajo.
Tal vez, por eso mismo los peloteros quisieron compensarles con un gran espectáculo de béisbol de casi 5 horas de duración. Pese a la duración del partido no abandonó el palco de honor George Steinbrenner, quien ha sido el dueño de los Yankees desde 1973. Otras personalidades que también acudieron al evento fueron el ex alcalde de Nueva York, Rudy Giulianni, que observó el juego desde el primer nivel de asientos, mientras que el millonario Donald Trump, lo hizo en el palco de Steinbrenner.
Ha sido la octava vez que la ciudad de Nueva York es sede del "Clásico de Verano" y la cuarta, y última, que lo hace en el viejo "Yankee stadium".
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